Creo que está bastante claro que fue lo que me llamó de este libro en un principio, fue sin duda la bonita portada y también la primera pagina (la cual sale en algunas sinopsis, pero que yo os dejo aquí). Me costará hablar de este libro, ya que cuando escribo reseña sobre ellos suelo nombrar los aspectos positivos más que los negativos. Y a decir verdad el libro no me ha gustado demasiado. El punto fuerte de la historia es sin duda las preguntas que te vas cuestionando a lo largo del libro, y la curiosidad que te despierta con solo leer la sinopsis. Ya que cuando lo vi dije "Tengo que leerme este libro". Así que la sinopsis me había dejado con un buen sabor de boca, pero del libro una vez terminado no puedo decir lo mismo.
La historia empieza cuando Mara despierta en un hospital y descubre que sus amigos han tenido un accidente, ella incluida, y que todos los demás están muertos. El problema es que nuestra querida protagonista no recuerda nada de todo aquello por mucho que lo intente y a pesar de que intentan ayudarla. Así que tras haber asistido a sus respectivos funerales decide cambiar de vida, ya que para ella es demasiado duro seguir allí y toda su familia se va con ella. Pero la verdadera locura empieza en su nuevo instituto, tanto para el lector como para Mara. A la chica le suceden cosas bastante fuera de lo normal, y coincidencias que la aterraran. Y a medida que avanza la historia encontraremos capítulos que nos llevan al pasado de Mara, en aquel edificio abandonado del cual sus amigos no salieron con vida, y de esta forma tanto ella como nosotros nos enteraremos de que fue lo sucedió aquella noche.
Una vez miré hacías atrás por encima de hombro, solo para comprobar si seguía allí. Allí seguía.
Una cosa que valoro mucho en los libros es que los personajes tengan personalidad, puedo o no sentirme identificada con ellos, pero yo necesito poder nombrar algo que los caracterice. Y en este libro no ha sido así. De la pobre Mara Dyer tan solo puedo decir que está medio loca, que no recuerda nada y que le pasan cosas extrañas. A veces me sorprendía su carácter, en otras su madurez y en otras me he quedado: como ¿En serio? de lo cría que me parecía.
En un segundo plano esta Noah, un chico que cuyo carácter y personalidad tampoco no me ha llegado a convencer, ni como a chico ni como a personaje. No es que haya odiado su carácter (Del cual carece bastante), es más el hecho de que me parece un personaje bastante típico y poco elaborado. Guapo, irónico, rico y enamorado hasta la médula de Mara. Y, además, he odiado el hecho de que la autora se empeñe en crear al chico perfecto, ya que le ha aportado un aire aún más surrealista a la historia. Y a medida que avanzaba la historia, más me ha desconcertado e irritado.
Es mi obligación mencionar que Noah es también el típico chico rubio y guapo que ha mantenido todo tipo de relaciones con todas las chicas de instituto. Pero de repente llega Mara y todo su mundo empieza a girar en torno a ella, lo cual provocara la sorpresa de muchas muchachas que le van detrás. Es decir, dejando a un lado todo esto del misterio nos encontramos con que en el instituto Mara no agrada demasiado. Conocemos también a algunos de sus amigos y por otro lado a aquella gente que de una manera algo exagerada quiere hacerla fuera de la vida de Noah. Lo cierto es que esta parte tampoco se me hizo demasiado creíble, aunque al final de la historia hay un porque del flechazo entre Noah y Mara que ayuda en parte a comprender por qué él se vio atraído a ella.
- Me quieres a tu lado - se limitó a decir categórico-. No me mientas. Te oigo
- Eso no importa - dije en un suspiro.
- Sí, sí importa. Tú me quieres a tu lado tanto como te quiero yo. Y tú eres lo único que quiero.
La historia en si se centra bastante en la relación Noah-Mara, que tampoco ha terminado de convencerme. ya que me ha parecido muy superficial. Pero si os gustan las relaciones un tanto irónicas seguramente os gusten como pajera. Lo que menos me ha gustado de todo ha sido el final, es decir vi este libro como un libro de misterio, suspense, o algo por el estilo, y cuando me leo el final lo único que me queda claro es que los dos personajes principales son unos bichos raros. No le encontré ni cabeza ni pies. Osea, sin duda la versión de la autora era la manera de dar una explicación a todo lo que les sucedía pero fue tan surrealista que a cada cosa que pasaba no podía evitar quedarme con cara de ¿WTF?
No me ha disgustado como escribe Michelle Hodckin pero tampoco ha conseguido engancharme del todo, y a momentos continuar la historia se me hacía bastante cuesta arriba, pero era más por los personajes que por la densidad que tiene o lo denso que se me pudo llegar ha hacer. El final queda abierto, muy abierto, y listo para una continuación. Pero en cambio de que me entraran ganas de leer el siguiente libro mi reacción fue (nuevamente): ¿Cómo?¿Qué?¿WTF? Para mi gusto la idea ha estado mal desarrollada, ya que prometía mucho con su sinopsis y me ha dejado con un mal sabor de boca. Personajes que no llegué a comprender, situaciones misteriosas que se solucionan con algo tan simple y a la vez surrealista que... no me ha resultado demasiado creíble.